Los Registros Celestiales hablan de la existencia de los "Serafines", una raza de seres divinos que dan bendiciones a la humanidad y a la que ofrecen oraciones a cambio. Los que están ungidos con la capacidad de interactuar con estos espíritus son conocidos como "Pastores". Aclamados como héroes por su pronta aparición en tiempos de crisis, aunque también son temidos por su poder, los Pastores están impresos en el folclore común junto con los Serafines. Sorey es un joven humano que ha pasado toda su vida viviendo en armonía junto a los Serafines en el pueblo de Elysia. Fascinado por los mitos de los Registros Celestiales, explora unas ruinas cercanas con Mikleo -su compañero Serafín de la infancia- con la esperanza de ilustrarse sobre la historia de los Serafines con la humanidad. Por desgracia, durante su investigación quedan atrapados en las profundidades del lugar histórico. Mientras buscan una salida, se encuentran con una misteriosa chica que busca desesperadamente la ayuda de un Pastor para salvar el mundo, que está a punto de ser consumido por la oscuridad. A pesar de la advertencia de Mikleo sobre el contacto con otros humanos, Sorey decide ayudar a la desconocida, lo que, sin saberlo, le acerca al sueño de la coexistencia pacífica entre el hombre y los Serafines